Utilizamos cookies propias y de terceros para analizar y mejorar su navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su instalación y uso. Mas información. Al utilizar nuestro sitio usted acepta los términos de nuestra Política de Privacidad.
Acaba de cumplir ocho años y ha superado lo que parecía imposible. En 2012 dijeron a sus padres que al pequeño sólo le quedaban unos días de vida a causa del gliobastoma, un tumor cerebral de difícil curación. Pero la protonterapia dio resultado.